Ivan | Tuesday, 14 July 2020
A la hora de hacer publicidad online, existen muchas opciones. Una de las más populares es Google Ads. ¿Sabes en qué consiste? En esta guía te contamos todo sobre esta herramienta y cuánto deberías invertir para ver resultados.
Antes de hablar acerca de cuánto invertir en Google Ads, es importante saber bien qué es y en qué consiste. Estamos ante una herramienta de publicidad que fue desarrollada por Google en el año 2000, para que los autónomos y empresas pudieran promocionarse por Internet.
Por medio de este tipo de publicidad, los usuarios que invierten en Ads aparecen en los primeros resultados de la SERP (resultados del buscador). Por lo que, optimizando bien las campañas conforme a las palabras clave adecuadas y al público objetivo, se puede sacar una gran rentabilidad.
Para empezar, necesitas una cuenta de Google y registrarte en Google AdWords. Una vez dentro, deberás indicar el presupuesto a invertir, crear el anuncio y configurar todos y cada uno de los parámetros, antes de ponerlo en marcha.
Utiliza un sistema de pago por clic (PPC), por lo que, solo pagas si la gente hace clic en tu anuncio. Claro que, esto no quiere decir que obligatoriamente vayan a contratar tus servicios, pero es una forma muy rentable de dirigir a tu web a personas que están buscando tus servicios.
Ahora sí, ¿cuánto debemos invertir? Está claro que Google Ads nos permite aumentar la visibilidad de una web y captar nuevos clientes. Normalmente cuanto mayor sea la inversión en publicidad, mayor probabilidad de obtener mejores resultados. Después de muchos años trabajando con Google Ads sabemos las estrategias iniciales que hay que seguir para que la publicidad sea todo un éxito.
Antes de realizar una campaña es importante asegurarse de si será rentable, de sí merecerá la pena. ¿Cómo saberlo de antemano? Lo ideal, es ir por partes.
Lo primero, es realizar un buen análisis de viabilidad de la campaña. Conocer los principales competidores, el precio medio de coste por clic, el presupuesto con el que se cuenta ...etc. Para este estudio es importante utilizar herramientas profesionales de las que obtener información muy valiosa antes de iniciar una campaña con los gastos que ello supone.
Posteriormente, lo primero pasa por hacer una buena búsqueda de las palabras clave. Es decir, los términos de búsqueda por las que quieres que los clientes interesados te encuentren. Durante este proceso aplicamos fórmulas propias de prospección que nos permiten detectar las palabras clave más rentables para un determinado mercado.
¿Cuántas palabras clave elegir? Dependerá del presupuesto y del mercado al que nos dirigimos. Hay mercados con una gran variedad de términos de búsqueda con buenos retornos de la inversión (ROI), en cambio hay otros muy acotados en que los términos de búsqueda rentables son unos pocos.
Seguidamente se establece la estrategia de pujas a seguir que vendrá condicionada por el objetivo de la campaña. Google Ads cuenta con una variedad interesante de estrategia de pujas a seguir: pujas manuales, automatizadas, centradas en conversiones ...etc
Esta estrategia también depende de muchos factores que han de ser estudiados previamente.
Lo que no se puede medir no se puede mejorar. Conversiones
Para saber si la publicidad está siendo efectiva, es importante no tener en cuenta sólo la cantidad de clics, sino las conversiones que generan. Es decir, en este punto nos referimos a las respuestas que hace el cliente a partir del anuncio, las reservas, las llamadas, las peticiones de información, etc...
Es imprescindible diseñar anuncios atractivos y que destaquen con respecto a la competencia. Lo ideal, es que lleven a una página de aterrizaje que contenga toda la información de manera clara y precisa. Google premia a los anunciantes que cuidan la experiencia de los usuarios con pujas más económicas, este punto marca la diferencia y podrá hacer que escales puestos por encima de tus competidores a un coste por clic más bajo.
Con el tiempo y la experiencia podrás ver qué combinaciones de palabras y anuncios funcionan y cuales descartar. Orientando las campañas hacia aquellos anuncios y palabras clave que obtienen más conversiones a un coste más bajo. Por lo que, dependiendo de la rentabilidad de las campañas, es probable que interese aumentar la inversión siempre y cuando se mantenga o aumente la rentabilidad.
¿Sabías que el precio del clic varía según la competencia? Debido a esto, en muchos casos la competencia que hay para unas determinadas palabras clave es la que de algún modo nos indica el presupuesto que hay que invertir. No se trata de una puja al mejor postor, Google Ads premia los anuncios bien segmentados, con una experiencia de usuario excelente y muchas variables que permiten aparecer en posiciones más altas a costes por clic más bajos.
Cuántos más datos tengas y más experiencia dispongas en el manejo de AdWords, mejores serán los resultados de la campaña. Pero es importante que conozcas todos los conceptos importantes, como el porcentaje de conversiones.
El porcentaje de conversiones por euro invertido es diferente según el sector, dado que no cuesta lo mismo siempre. Puede variar de muchos factores y puede ser del 1%, de 2% o más. Depende del producto, del servicio y de la competencia.
Lo que está claro, es que varían de un negocio a otro, del sector. En algunos, un 2% puede ser un gran ROI, pero en otros pueden necesitar un 4% para ganar. Si los servicios que ofrecemos tienen bastante margen podemos permitirnos invertir más dinero para que nos compense el retorno de la inversión.
¿Sabías que uno de los factores que más influyen es la urgencia del servicio? Si es un servicio que el usuario necesita de forma urgente, es posible que te compense utilizar una estrategia de pujas de parte superior de página, porque se trata de un usuario que busca ser atendido cuanto antes y no tiene tiempo de comparar precios. Lo más probable es que el usuario vea el anuncio y llame, porque necesita un electricista o un cerrajero con urgencia.
Evidentemente, no todos los productos o servicios se demandan igual. Digamos que, algunos pueden esperar y otros no. En el caso de ser un servicio donde no se puede esperar, tenlo en cuenta para optimizar tu campaña y rentabilizar más tu inversión.
Una de las grandes ventajas de invertir mucho dinero en una campaña de AdWords, es que a mayor inversión, mayor cantidad de datos y antes se podrá optimizar, por tanto, más pronto se rentabiliza. Por lo que, al invertir mucho más dinero puedes comprobar lo que funciona y lo que no. Lo que te ayudará a hacer campañas más optimizadas a medio y a largo plazo.
Hay que tener en cuenta, que las primeras campañas son de prueba. Es decir, las primeras semanas son de testeo, una inversión necesaria para poder optimizar la campaña poco a poco. Es la manera en la que tienes de estudiar el mercado y de dar con la fórmula exacta para saber qué cantidad invertir y qué conversiones conseguir.
Lo que está claro, es que si la campaña está bien optimizada, a mayor presupuesto, mayor rentabilidad obtenida. Por lo que, si en tu sector hay mucha competencia por las mismas palabras clave, es posible que tengas que subir el presupuesto, para optimizar antes la campaña y estudiar realmente cuanto de rentable es la inversión.
Durante la campaña en Google Ads es posible que te preguntes si merece la pena limitar la inversión. En el caso de negocios pequeños o medianos, seguro que no lo dudan a la hora de hacerlo. Pero, tras meses de campañas y tener controlados los márgenes de rentabilidad de la publicidad, es muy probable que interese aumentar el presupuesto.
Al principio, por miedo o por haber qué ocurre, se suele hacer. Pero luego, ya no tiene tanto sentido limitarlo, porque los anunciantes que quieren conseguir la máxima rentabilidad no lo limitan si es rentable. Esto es, porque comprueban que a mayor inversión mayor es la facturación.
Si por cada euro que inviertes en Google Ads compruebas que se obtiene más beneficio, te compensa invertir más que menos. Por eso, es mejor no poner un tope. O, de hacerlo, ponerlo cuando la rentabilidad se estanca. Pero mejor aprovechar siempre el tirón, sobre todo cuando es un crecimiento sostenido.
Es posible que llegados a este punto tengas una idea más clara sobre lo que es AdWords y lo que puedes conseguir. Pero, para entenderlo mejor y ver porqué un presupuesto mayor se traduce en más éxito, veamos un ejemplo.
Imagina que un bufete de abogados en Las Palmas invierte 1.000 euros todos los meses. Para ello, deberá competir por palabras clave como “abogados en Las Palmas”, “abogados de divorcios en Gran Canaria” y muchas otras. Si por ejemplo el coste por clic es de 1 euro y recibimos unos cinco clics al día, al mes serán unos 150 clics.
Se puede establecer un presupuesto diario, cuando se llega al límite, los anuncios dejan de visualizarse para no excederse del presupuesto establecido y que no gastes más de la cuenta. También verás que es realmente complejo saber qué funciona y qué descartar con apenas 5 clics diarios, porque podrían dar lugar a solo una petición de información cada varios días y un par al mes; haciendo un porcentaje de conversión de un 4% aproximadamente.
A mayor precio por clic, mayor deberá ser la inversión para notar los resultados. Por eso te decimos que depende de muchos factores y, solo el tiempo te dirá cuál es la cantidad mínima que debes invertir para ver los resultados deseados.
No obstante, volviendo al ejemplo anterior, eso no quiere decir que un abogado que invierte mil euros al mes en Las Palmas no le renta. Si recibe 5 llamadas y todas terminan en contratación y cada servicio contratado cuesta 500 euros, estaría ganando 2.500 euros - 150 euros de publicidad = 2.350 euros. Saldría ganando y estaríamos ante un retorno de la inversión muy rentable.
Si la rentabilidad se mantiene, a mayor presupuesto, mayores conversiones, mayores ventas y mayor retorno de inversión. Por lo que, merece la pena invertir un poco más para crecer.
Si quieres conseguir la mayor rentabilidad posible con tus anuncios en Google Ads, debes conocer bien el ROI y analizarlo. Porque no solo es importante gestionar los costes de la publicidad, sino maximizar el retorno de los costes. Para ello, deberás tener en cuenta el coste por conversión.
Al hacer una inversión mayor, al gastar más dinero, podrás tener muchos más datos con los trabajar, ver y evaluar, para así poder aumentar el ROI. Es lo que se conoce como patrones de estacionalidad del mercado, que incluso podrían darte pistas de lo que funciona mejor según la época o el momento en el que te publicitas.
Si has leído hasta aquí habrás comprobado que hay muchos factores que interfieren en el éxito de una campaña y, cuantos más datos tengas, mejores decisiones podrás tomar. Habrá días más rentables, habrá dispositivos desde donde se conectan más usuarios, el sexo o la franja de edad más frecuente, etc. Todo ello er ayuda a aumentar el ROI, por lo que, a mayores datos, mejores resultados.
Por todo esto, es por lo que es tan importante que exista un equilibrio entre todas las partes que conforman el anuncio en Google Ads. Desde la campaña en sí hasta la propia página de aterrizaje. Todo debe ser perfecto, para que funcione. Si una de las cosas está mal, no tendrá tirón.
Hay personas que se centran solo en la campaña en Ads en sí pero olvidan otro de los puntos más importantes, la página de aterrizaje. Si el mensaje no convence o no se indica con claridad, podría tirar para atrás. Es importante que todo sea profesional, porque influye en el porcentaje de conversiones por euro.
Insistimos en que es un equilibrio de todas las partes que lo conforman. Cuanto más esté trabajada cada parte, mejor. Y, si en algún momento empieza a caer, investiga el porqué y corrígelo, porque puede llegar un día en el que ocurra.
Lo mínimo recomendable es de unos 3-5 euros diarios para campañas locales. Es una cifra recomendable para empresas pequeñas o medianas que quieran obtener una buena rentabilidad, para recuperar la inversión y ganar dinero. De ahí en adelante es una muy buena cifra.
Ten en cuenta, que lo mismo no te va a funcionar para siempre, dado que depende mucho de tus competidores o de la evolución del coste por clic de las palabras clave. Si tus competidores aumentan la inversión, podrían “obligarte” a hacerlo indirectamente para obtener la misma rentabilidad que antes (o más).
¡Esperamos que la guía te haya resultado amena y útil!
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